Tan firmes eran las convicciones de la maestra -Nora Angélica López Delgado-, de quedar como abanderada del PRI a la alcaldía coatepecana, que el día del ungimiento de -Roberto Pérez (Juanelo)-, lo único que pudo hacer, en lugar de pelear su “derecho”, fue irse a llorar al aula de usos múltiples del CDM del PRI coatepecano; de la pena que daba, hasta el delegado del PRI en el distrito XIII -Carmelo Huesca-, tuvo que ir a sacarla del escondite (después de que Él la plancho), para que se incorporara al bautizo sacrosanto de –Juanelo, y así poder rescatar lo poco de dignidad que le quedaba (en ese momento), porque la perdió por completo cuando se le vio, alzándole la mano al vencedor interno… hasta todo y foto le tomaron.
Claro, que eso no quedara atrás para -Nora Angélica López Delgado-, pues se le ha visto con actores políticos de diferentes partidos, ajenos al suyo. La pregunta es ¿Qué temas tocaran?; sería una pena que se tratara de… traición a su candidato oficial y al mismo tiempo, a su instituto político; pues como sabrán, ella tiene mucho que agradecerle al PRI, como: ser la Presidenta Interina (dedazo, al no estar ratificada en asamblea) del CDM, estar comisionada con salario íntegro de la SEV (ya no da clases como maestra y sigue cobrando como si trabajara) y ser la primer propuesta en la planilla de –Juanelo-, para ser regidora. Sería una pena para el PRIISMO coatepecano, que –Nora- operara en contra.
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